Quantcast
Channel: Crónicas guanacas
Viewing all 127 articles
Browse latest View live

Explicar un país en cinco minutos

$
0
0

Vaya por delante que me sé un orador mediocre, que hablar en público nunca ha sido plato de buen gusto, y que desde mi primer día en la facultad me supe rehén del periodismo escrito, con la firme determinación de mantenerme lejos en la medida de lo posible de cámaras, micrófonos y atriles. Pero al igual que no me gusta bailar y hay situaciones en las que es imposible negarse, uno es consciente de que en esta profesión a veces toca dialogar en vez de redactar, y sé valorar también la sensación de saberse pretendido para comentar algo, aunque nunca dejará de ser un trago con un regusto amargo.

Este preámbulo es porque en la primera semana de febrero, con la excusa de las elecciones presidenciales en El Salvador, me buscaron de la Cadena SER para hablar sobre el fenómeno de las maras. El colega Ramón Lobo, a quien tuve el gusto de conocer en San Salvador en mayo de 2013, sugirió mi nombre a la producción de A vivir que son dos días, para el programa del domingo 9 de febrero. Un par de días antes me llamó una amabilísima compañera que creo recordar que se llamaba Paqui y me explicó las reglas: conexión en directo, cinco minutos, ocho y media de la mañana, Javier del Pino y Ramón Lobo, las maras. Luego me planteó algunas preguntas guía“¿Hay un pacto entre estas bandas y el gobierno? ¿Se puede abandonar una mara? ¿Es posible que haya mujeres dentro de una de ellas?” y me sugirió prepararme algo las respuestas. 

Agradecido por la oportunidad pero inquieto por lo arriba explicado llegó el domingo. ¿Cinco minutos para explicar algo tan complejo y enrevesado como las maras? ¿Cinco minutos para un fenómeno social del que podría escribirse una enciclopedia entera y aún quedarían cabos sueltos? ¿Hacerlo además para un oyente –el español promedio– que desconoce conceptos básicos como Mara Salvatrucha (MS-13) y el Barrio 18? ¿Cinco minutos para explicar El Salvador?

Este fue el resultado:



Pasó lo que me temía. De los datos e ideas que anoté en un papel para diseminarlos durante la plática no alcancé a decir apenas nada, en parte porque los cinco minutos y dieciocho segundos entre el saludo y la despedida resultaron poco más que un chasquido. Eran datos e ideas que, creo yo, ayudaban a entender mejor cuán grave es el problema de violencia que afecta a El Salvador. Datos e ideas que, aunque siempre insuficientes, perfilaban el porqué del fenómeno de las maras. Datos e ideas que no supe meter en la conexión, pero que reciclo ahora sin mucho esfuerzo como entrada de este blog. 
  1. El Salvador es un país más pequeño que la provincia de Badajoz y con una población similar a la de la Comunidad de Madrid, poco más de 6 millones de personas. 
  2. En El Salvador asesinaron en 2011 a 4,374 personas; y en 2013, a 2,490. La significativa reducción está ligada a una tregua que pactaron las dos principales pandillas que operan en el país (Mara Salvatrucha y Barrio 18), una tregua auspiciada por el Gobierno de la República (aunque el presidente Mauricio Funes lo niega, supongo que cree que le restará votos) y respaldada por la Organización de Estados Americanos. 
  3. En 2013, según datos recientes del Ministerio de Interior, en España hubo 302 asesinatos. Para igualar la tasa de homicidios por cada 100,000 habitantes de El Salvador de 2013, en España tendría que haber habido 18,687 asesinatos. Y para igualar la tasa de antes de la tregua, tendrían que asesinar a 33,222 españoles en un año, 91 cada día.
  4. Las maras no son un problema de hoy o de hace cinco o diez años, que es cuando los muchachos tatuados empezaron a tener presencia mediática en España. En El Salvador los primeros integrantes de las dos letras o los dos números se comenzaron a ver antes de los Acuerdos de Paz que en 1992 pusieron fin a la guerra civil.
  5. Las pandillas proliferaron a inicios de los noventa porque existía el caldo de cultivo idóneo: pobreza extrema, desigualdad, falta de oportunidades, violencia social, desintegración familiar, promoción del consumismo como valor absoluto, un Estado raquítico, unas fuerzas de seguridad desmanteladas, una nueva arquitectura jurídica impuesta por la comunidad internacional sin medir las consecuencias...
  6. Sobre este cóctel explosivo el gobierno de Estados Unidos espolvoeó miles de pandilleros, salvadoreños emigrados durante el conflicto, crecidos en las calles de Los Ángeles, y luego deportados a El Salvador; con ellos viajó la cultura pandilleril.
  7. Pasó más de una década desde el bum inicial de las pandillas hasta su radicalización y su conversión en grupos del crimen organizado, sin matices. En ese tiempo el Estado salvadoreño fomentó esa mutación con políticas públicas como el manodurismo o la asignación de cárceles enteras para cada una de las pandillas.
  8. Hoy día en El Salvador, según cifras oficiales, hay más de 60,000 pandilleros activos, casi todos ellos integrantes de las dos pandillas mayoritarias. Incluido su entorno social, el gobierno habla de más de 400,000 personas vinculadas a estos grupos, dependientes en su mayoría de actividades delictivas. Eso supone el 6-7% de la población.
El fenómeno de las pandillas es doloroso y apasionante, y obvio que no aspiro a que ocho parrafitos llenos de números y deshumanizados vayan mucho más allá que cinco minutos de respuestas en una radio, si la aspiración es conocer un tema tan complejo. Pero quizá sirvan para que incentivar el interés. Por si alguien se ha quedado picado y quiere explorar ese lado humano del profundo y sangrante tajo que la humanidad tiene en El Salvador, me atrevo a sugerir tres crónicas de largo aliento escritas en los últimos años: Yo violada, Yo torturado y Yo madre

Fotografía Roberto Valencia
---------------------------------------------
(Este texto se publicó primero el 15 de febrero de 2014 en Bajomundo, mi blog de la revista Frontera D, bajo el título 'Explicar un país en cinco minutos')

Una sociedad enferma

$
0
0

¿Cómo llegamos a esto(*)? 

Foto tomada de Facebook y modificada para proteger al menor
No me refiero a la fotografía curiosa-simpática-aberrante en función de quien la adjetive, sino a lo que hay detrás. Y lo que hay detrás es una joven filoemeese que promueve orgullosa la imagen de su hijo rifando barrio, y que apuntala el sinsentido con loas a la que define como su verdadera familia, la Mara Salvatrucha, organización responsable de miles de asesinatos tan solo en El Salvador. Lo que hay detrás, basta invertir unos minutos escarbando en internet, es una presencia cada vez mayor de las pandillas en Facebook, en YouTube, creciente de unos pocos años hacia acá, en la medida que internet ha dejado de ser algo exclusivo de clases medias y altas. Lo que hay detrás no es un hecho puntual extraordinario singular, sino cotidianidad. Lo que hay detrás es un problema social transfigurado en problema de seguridad pública. Lo que hay detrás son, cifras oficiales, más de 60,000 pandilleros activos con un entorno social afín a las pandillas –madres, novias, simpatizantes, hijos, colaboradores, chequeos, mascotas...– de 400,000 personas, en un país de poco más de 6 millones. Lo que hay detrás es la parte que menos gusta cuando la sociedad salvadoreña se mira en el espejo, como le sucede al cuarentón vanidoso que contiene la respiración y saca pecho para disimular su prominente barriga. Lo que hay detrás es, pese a quien pese, una redefinición de la salvadoreñidad en la que el pandillerismo más destructivo es un componente sine qua non. Lo que hay detrás es El Salvador. 

Pero reitero, ¿cómo llegamos a esto?

Pasó que cuando en 1992 terminó la guerra civil nadie se preocupó del trauma colectivo en una sociedad rota y empobrecida. Una estrategia de atención psicológica masiva, hecha a tiempo y complementada con programas sociales efectivos, quizá habría amortiguado el problema. Cada comunidad cantón barrio debió haberse llenado de psicólogos sociólogos trabajadores sociales. Pero no. 

Pasó que en los noventa Naciones Unidas y la comunidad internacional quisieron meter a El Salvador a empujones en el primermundismo, sin medir las consecuencias. A base de golpes –de muertos– comprobamos que quizá no fueron las mejores ideas inventarse un cuerpo policial en plena posguerra o importar leyes efectivas para otras latitudes, pero inaplicables en El Salvador por falta de recursos o de voluntad política. 

Pasó que desde el rencor o la ignorancia se exigieron y se aplaudieron –se exigen y se aplauden– los grupos de exterminio, cuando es tan sencillo verificar que el boom de las maras en San Miguel fue precisamente después de la Sombra Negra. 

Pasó que los gobiernos adoptaron durante veinte años políticas públicas que parecen diseñadas para radicalizar el pandillerismo: la Mano Dura, la Súper Mano Dura, la asignación de cárceles a cada pandilla, el hacinamiento salvaje, el abandono de estrategias de inserción social... Las maras en la posguerra eran un problema de orden público que no se desactivó a tiempo, se dejó crecer, el Estado fomentó su mutación con un manodurismo estrictamente electoral , hasta que devino en problema de seguridad nacional. 

Pasó que nos prometieron el Cambio en 2009, y en materia de seguridad pública sí hubo un cambio que ha salvado estadísticamente miles de vidas, la tregua, aunque el Gobierno se niega a reconocer su paternidad y sigue sin apostar de lleno –por impopulares, por cálculos electorales– a los temas impostergables de la prevención, la inserción y la rehabilitación.

Pasó que los periodistas seguimos el juego a los políticos que en los primeros lustros sobredimensionaron el problema de las maras para ocultar la corrupción, el narcotráfico, la impunidad...

Pasó que las oenegés, asociaciones y fundaciones que velan por los derechos humanos subdimensionaron el problema de las maras. Eran los llamados a ser la conciencia crítica ante tanto despropósito pero, en general, trataron de convencernos de que los pandilleros eran responsables de una pequeña fracción de la violencia que ocurre en el país, incluso cuando el fenómeno estaba ya desbocado. Algunas aún hoy siguen atrincheradas en ese error. 

Pasó que la Academia apenas hizo nada. 

Pasó que asumimos que era normal pagar por la salud, por la educación, por dar un paseo con los hijos sin temor a ser asaltado... por tantos derechos básicos. ¿Y qué pasa con quienes no pueden pagarlo? 

Pasó que los que no tenemos el problema en la puerta de casa nos dejamos convencer de que la inseguridad se combate con muros, razor, plumas, guardias y evitando viajar en bus. 

Pasó que la seguridad pública (la inseguridad pública) se convirtió en modo de vida, pero no solo para los dueños de empresas de seguridad o para los que venden pistolas o razor, también para quienes analizan filosofan investigan oenegean sobre las soluciones al fenómeno de las maras. También para quienes escribimos crónicas. 

Pasó que creamos una sociedad en la que parece que si no se consume, no se vive, pero luego bendecimos con nuestro voto a los políticos que permiten que el salario mensual de una cajera de supermercado sea 220 dólares, o que un cortador de caña gane 110 dólares. 

Pasó que quienes ganamos 700, 1,000 o 1,500 dólares nos quejamos de que apenas alcanza para llegar a fin de mes, pero no vemos problema en pagar ocho o diez dólares por ocho o diez horas de trabajo a la señora que nos cuida los niños y/o nos limpia la casa. 

Pasó que como sociedad nos inmunizamos ante el dolor ajeno. 

Pasó que quienes creemos que la única forma efectiva de revertir esto es invertir mucho dinero en programas efectivos de prevención en las comunidades y en rehabilitar al delincuente que está encarcelado no nos sabemos imponer a las barras bravas que solo creen en el ojo por ojo. 

Pasó que el problema de las pandillas lo dejamos crecer demasiado y se volvió enrevesado y deshumanizado. Ojalá me equivoque porque es pura especulación, pero me temo que tardaremos muchos años en neutralizar las consecuencias de haber construido una sociedad tan violenta, una sociedad tan enferma. 

---------- 

(*) Aclaración para lectores no salvadoreños o para salvadoreños con conocimientos limitados sobre las maras, el problema de convivencia más grave que afecta al país: el niño, de unos tres años, está rifando Mara Salvatrucha. Con su mano derecha hace la 'M', que a su vez representa la garra que es el símbolo de esta pandilla; y con su mano izquierda gesticula una 'S'.

Decimonoveno comunicado de las pandillas

$
0
0

Foto Fred Ramos (El Faro)

[Este comunicado lo suscriben las pandillas Mara Salvatrucha 13, Barrio 18, Mao-Mao, Mara Máquina y La Mirada Lokotes 13 y un colectivo de reos civiles que se han sumado al proceso. Se hizo público el día 12 de marzo, tres días después del segundo aniversario de la tregua que, auspiciada por el Gobierno de la República, las pandillas Mara Salvatrucha y Barrio 18 iniciaron el 9 de marzo de 2012. Ese día se celebró la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, ganadas por el candidato del FMLN, Salvador Sánchez Cerén.] 
 
*** 

Los voceros nacionales de las pandillas MS-13, Barrio 18, Mao-Mao, Máquina, Mirada Locos, privados y privadas de libertad de origen común, al pueblo salvadoreño y demás pueblos del mundo hacemos saber: 

El día domingo 9 de marzo de 2014, dos hechos de gran trascendencia nacional, por cosa del destino o por obra divina, se conjugaron; nos referimos al segundo aniversario del Proceso de Tregua y de Paz al cual dimos inicio las pandillas salvadoreñas el 9 de marzo de 2012, y la realización de la segunda ronda del proceso electoral para elegir presidente y vicepresidente de la República para el periodo 2014-2019. 

El Proceso de Tregua y de Paz, contrario a lo que vaticinaron sus detractores, quienes afirmaron que no era sostenible, que no se podía confiar en nosotros y que era un proceso falso e hipócrita, este se ha extendido ya por dos años, y lo que es más importante, ha producido resultados que lo convierten en el experimento más exitoso en cuanto acciones de prevención de violencia del que se tenga conocimiento en toda la América Latina; entre los resultados más importantes podemos citar:
  • A. Disminución en un 50 % en la tasa de homicidios con relación a los niveles de finales del año 2011.
  • B. La vida de 5,539 salvadoreños ha dejado de perderse durante estos dos años.
  • C. La tasa de extorsiones se redujo en un 18%.
  • D. 504 armas de guerra fueron entregadas de manera voluntaria.
  • E. Más de 1,200 ilícitos fueron entregados de manera voluntaria por los privados/as de libertad al interior de los centros penales.
  • F. Tranquilidad y estabilidad en centros penitenciarios, pese a contar con un 325% de hacinamiento, constante acoso de autoridades penitenciarias y de purgar las penas en condiciones de reclusión infrahumanas.
  • G. Cientos de jornadas de limpieza y borrado de grafitis en los barrios.
  • H. Apertura de procesos de reconstrucción del tejido social que, producto del conflicto, se ha roto en los municipios y comunidades.
  • I. Once municipios donde habitan más de un millón de salvadoreños se han incorporado al proceso de Municipios Libres de Violencia, donde las pandillas participamos como actores locales en la reducción de la violencia y la experiencia es altamente exitosa. Otros municipios están en espera de incorporarse a este proceso.
  • J. Junto a actores comunitarios y empresarios, hemos dado inicio a otra modalidad complementaria del proceso de paz, que consiste en declarar 'Zonas de paz'áreas del territorio salvadoreño; ya lo hicimos en un sector de la colonia Escalón y estamos trabajando otras dos nuevas zonas en la ciudad capital que en su oportunidad daremos a conocer.
Nos alegra de gran manera que, por encima de la vileza con la que han actuado aquellos que en lugar de apoyar este proceso se han dedicado a cuestionarlo y hasta quererlo destruir para beneficiar a los que se lucran y se enriquecen de la violencia, se estén sobreponiendo los más sensatos, los que en verdad quieren la paz para El Salvador. A todos, nuestro más ferviente saludo, en especial a los facilitadores del Proceso, a los obispos y pastores que conforman la 'Iniciativa Pastoral por la Vida y por la Paz' a los empresarios que han dado vida a la Fundación Humanitaria, y por supuesto, a las organizaciones internacionales de cooperación que han creído y han apoyado este esfuerzo que persigue aprovechar la oportunidad histórica que se le ha presentado al país para la recuperación de la Paz. 

A los ganadores del evento electoral de este 9 de marzo de 2014, el profesor Salvador Sánchez Cerén como presidente constitucional de la República, y el Lic. Óscar Ortiz como vicepresidente, les enviamos nuestras felicitaciones. Aprovechamos para expresarles que por nuestra parte seguimos empeñados en continuar con el proceso iniciado hace dos años, y si ustedes nos lo permiten, queremos seguir siendo parte de la solución del problema de violencia que afecta al país. 

A los que no resultaron ganadores el 9 de marzo (el partido ARENA) (lo decimos así porque tampoco han sido derrotados), les expresamos que no les guardamos ningún rencor ni resentimiento por lo que hayan dicho o hecho contra nosotros y contra el proceso de paz en la primera fase de la contienda; entendemos que esas acciones fueron parte de las estrategias electorales, esto lo comprendimos cuando cambiaron radicalmente el discurso en la segunda ronda de la campaña. 

Ante lo acontecido el 9 de marzo, les instamos que por nada del mundo le den cabida a ningún tipo de sentimiento de derrota. La vida del país no terminó el domingo recién pasado, mucho menos la de su partido, ustedes siguen siendo la principal fuerza de oposición, la que representa una de las dos mitades en la que ha quedado dividido el país. Esperamos que el discurso sobre la violencia que sostuvieron en la segunda ronda electoral haya sido sincero, ya que, de serlo, sabemos de antemano que podemos contar con el apoyo de ustedes para impulsar iniciativas que favorezcan la recuperación de la paz, la cual solo será posible si nos unimos todos los salvadoreños. 

Si el convencimiento expresado por ustedes en el tema de seguridad en la segunda ronda es puro, bien pueden dar una excelente lección de patriotismo, madurez política y de profundo amor por el país y a su gente, ofreciendo a los nuevos gobernantes su apoyo a la superación de la violencia y la recuperación de la paz, tomando como base, el apoyo a la continuidad del exitoso proceso que desde el 9 de marzo de 2012 está en desarrollo en El Salvador. Les prevenimos a no caer en las trampas de la tentación, más de algún asesor electoral les va recomendar continuar con la movilización social, ser beligerantes y elevar la confrontación para obtener resultados favorables en las próximas elecciones de marzo de 2015; si deciden optar por ese camino, por favor no vuelvan a cometer el mismo error de incluir como parte de la confrontación el tema de seguridad, por el bien de El Salvador, en ese punto, debemos de procurar que todo el país se encuentre unido y la mitad que ustedes representas es clave para ello. 

Finalmente, queremos agradecer a los facilitadores del Proceso de Tregua y de Paz, monseñor Fabio Colindres y Raúl Mijango, por su patriótica participación en este proceso; sabemos que los enemigos de la paz y los que trabajan a favor de los interés de los que se lucran de la violencia les han atacado fuertemente, han recurrido hasta la infamia para desacreditarles e incriminarles, pero nos alegra que no se hayan dejado doblegar, porque quienes les atacan no saben que ustedes poseen un bien muy escaso en nuestras sociedades que se llama valentía moral, esa que hace que pocos hombres estén dispuestos a desafiar la desaprobación de sus semejantes, la censura de sus colegas, la ira de la sociedad. Este bien es más escaso que el arrojo en la batalla o una gran inteligencia. Y sin embargo es la cualidad esencial, vital, para quienes se proponen cambiar el mundo que solo sede al cambio con dolorosos esfuerzos; como bien lo expresó uno de los mejores estadistas norteamericanos: Robert F. Kennedy.
El Salvador, 12 de marzo de 2014 

-------------------------------------------------------------
Lea además:

Un pueblón llamado San Miguel

$
0
0

Comencé a frecuentar San Miguel a finales de 2001, al poco de haber migrado a El Salvador. Me he dejado perder incontables veces por la cuadrícula de su parte vieja, he comido pupusas en el mercado a cielo abierto que es su centro, me he bañado en esa prolongación de la ciudad que es la playa El Cuco, he disfrutado en sus calles del popular Carnaval, y hasta he tenido el honor de ser jurado en la elección de la reina. San Miguel nunca aparecerá en esos pomposos listados de rincones del mundo que uno tiene que conocer antes de morir, pero tiene algo, personalidad propia, es un lugar que se deja querer, adictivo. Creo que parte de su encanto radica en su condición de ciudad pueblón, dicho en el sentido más puro e inocente de la palabra: pueblón como pueblo grande, sin carga peyorativa alguna. Es cierto que el título oficial de ciudad lo tiene desde el siglo XVI, que es cabecera departamental y que en toda la zona oriental del país no hay otro poblado más poblado, pero exhala esa entrañable sensación de que todos conocen a casi todos. 

Fotografía Roberto Valencia

Hablan del Mágico

$
0
0

Los futboleros ya saben, pero no está demás comenzar aclarando que France Football es quizá la más prestigiosa revista dedicada al fútbol entre todas las que se publican en el mundo. Es la que se inventó el codiciado Balón de Oro, y lo entregó entre 1956 y 2009.

Pues bien, un día de estos, sin pretenderlo, uno encuentra en internet una edición de la France Football de finales de 1988 que incluye una extensa entrevista con Jorge Mágico González. Y de inmediato siente que la casualidad le ha arreglado el día. Y uno lee el artículo, escrito por el periodista Francis Huerta, y siente la imperiosa necesidad de compartir lo que se decía –se escribía– sobre el Mágico hace un cuarto de siglo en España, pero sobre todo en Cádiz, la ciudad que lo adoptó. Tanto elogio en un único reportaje no puede ser casualidad.

Dice Francis Huerta, el periodista: “Esta salvadoreño de unos 30 años es uno de los mejores futbolistas de ataque del mundo”.

Dice Thomas N'Kono, portero de Camerún y del Espanyol: “¿El Mágico? ¡Un día me marcó un gol que todavía no he entendido cómo!”.

Dice Diego Armando Maradona: “El más técnico”.

Dice Emilio Butragueño, jugador del Real Madrid: “El mejor extranjero que juega en España”.

Dice Michel Pineda, delantero del Espanyol: “¿No conoces al Mágico González? Te juro que es mejor que Maradona. Además es un 'fiestero' fantástico. ¡Un genio sobre el terreno de juego!”.

Dice Vincent Machenaud, periodista de L'Equipe: “Es increíble. Hace cuatro años, en el Trofeo Carranza, en Cádiz, el público sacó los pañuelos blancos, y eso que salió a falta de media hora para el final”.

Dice Enrique Ortego, periodista de Marca: “¿El Mágico? Un fenómeno”.

Dice Andoni Zubizarreta, portero del FC Barcelona: “Yo nunca he visto una persona tan hábil con el balón”.

Dice Paco Perea, periodista del Diario de Cádiz: “Como ser humano Jorge es maravilloso. No quiere la gloria, solo quiere vivir, igual que la gente de Cádiz; por eso es que en esta ciudad lo comprendemos”.

Y digo yo: Mágico, solo uno.

Una cárcel nica

$
0
0

Ubicado en las afueras de la ciudad de Tipitapa, a veintidós kilómetros de Managua, el centro penal La Modelo alberga a 2,400 personas, un tercio de los privados de libertad que tiene Nicaragua. La calle de acceso es larga, recta y el asfalto es escaso, pero movimiento no le falta. Las visitas de familiares convierten el lugar en un vaivén de caponeras, nombre que aquí dan a unas bicicletas adaptadas para el transporte de personas, y uno intuye que se acerca a la entrada por el aumento desmesurado en el número de puestos de comida. Las primeras dos plumas que regulan el acceso están pintadas de negro y amarillo, y justo encima cuelga un rótulo grande y cuadrado que tiene dibujado el perfil de una botella y unas letras: Bienvenido al Sistema Penitenciario Nacional. Lo donó la Coca-cola. 

Entrar al recinto dentro del carro de Luis Amado Peña –el sacerdote encargado de la pastoral penitenciaria– resultó tan sencillo como ingresar a una residencial privada junto al presidente de la junta directiva. Pero ahora, al salir, el funcionario de turno –pantalón verde planchado y una camisa blanca impecable– abandona la sombra de la caseta y, después de saludar respetuoso y de intercambiar unas palabras, gira alrededor del pick-up mientras se encorva ligeramente para mirar en los bajos del vehículo. 

—Desde hace unas semanas están revisando más –dice el padre Peña–. Es por esa fuga que te conté el otro día. 

El pasado 18 de febrero un joven llamado Álvaro Valverde se fugó de Tipitapa. Se cree que lo hizo asido al chasis de un autobús. Cuando el bus se alejó lo suficiente, el joven se descolgó, paró un taxi que iba en sentido contrario y desapareció. Tres días permaneció prófugo, pero al cuarto Valverde regresó arrepentido a Tipitapa acompañado por su padre y su abogado. Desde entonces los controles son más estrictos. 

—Ay –se lamenta el padre–, pero los problemas son para resolverlos, no para cerrar las cosas. 

Fotografía La Prensa
--------------------------------------------------
(Esta es la entrada de un reportaje publicado el 20 de mayo de 2011 en el periódico digital El Faro, bajo el título “¿Cuál es el secreto de las cárceles nicaragüenses?”)

Vigésimo comunicado de las pandillas

$
0
0
 
[Este comunicado lo suscriben las pandillas Mara Salvatrucha 13, Barrio 18, Mao-Mao, Mara Máquina y La Mirada Lokotes 13 y un colectivo de reos civiles que se han sumado al proceso. Los retirados o pesetas siguen sin suscribirlos. Se hizo público el día 29 de abril, en una especie de conferencia de prensa a la que, según detalló Paolo Luers en su blog, asistieron cinco comunicadores. En el evento, celebrado 'en la libre', hubo un representante de cada una de las tres principales pandillas: la Mara Salvatrucha, la facción Sureños del Barrio 18 y la facción Revolucionaria del Barrio 18.] 
 
***

Los voceros nacionales de las pandillas: MS-X3, Barrio 18, Mao-Mao, Máquina, Mirada Locos 13 y privadas y privados de libertad de origen común al pueblo salvadoreño y demás pueblos del mundo, hacemos saber:
  1. Está por finalizar el mandato de la administración del presidente Mauricio Funes y, entre sus principales logros, se puede destacar el haber facilitado un proceso que por 15 meses consecutivos hizo posible la reducción de los niveles de violencia armada de un promedio de 14 a 5 homicidios y la disminución de 70 homicidios por cada 100,000 habitantes a 41. En sentido inverso, también se puede considerar como fracaso el no haberle dado continuidad a la facilitación del proceso, generándose con ello una multiplicidad de dificultades, que han repercutido negativamente y provocado que los niveles de violencia se recrudezcan en las calles y estén alcanzando ya para el final de su mandato, un promedio de diez homicidios diarios; aunque aún no se llega a los niveles de finales de 2011 gracias a que el proceso, pese a los ataques que ha recibido, aún sobrevive. La situación es delicada y demanda por el bien del país a las nuevas autoridades detener esa situación.
  2. Estamos dando un agudo seguimiento al debate que a nivel nacional se está librando sobre el tema de la violencia y principalmente sobre sus posibles alternativas de solución; de igual forma, estamos estudiando con acuciosidad y profundo interés las propuestas serias y estructuradas que se han venido presentando por parte de aquellos que tienen un genuino interés de trabajar a favor de la paz. Nos alegra sobremanera que se esté librando este debate, pues ello permitirá no solo hablar del problema, sino de sus posibles alternativas de solución; no solo de los efectos, sino también, de las causas estructurales que lo generan.
  3. En los últimos días, se habla de la existencia de “dos procesos de pacificación”; nosotros conocemos de la existencia de uno solo, que es el que dio inicio el 9 de marzo de 2012, en el cual hemos participado y asumidos compromisos; por tal razón, apoyamos plenamente la propuesta presentada por la Iniciativa Pastoral Por la vida y por la Paz, en el entendido que es una propuesta que con mucho respeto se le está haciendo para su consideración a las nuevas autoridades electas, que tomarán posesión el 1º de junio de 2014. Como lo expresamos en anterior comunicado, nuestra voluntad de contribuir a la pacificación del país sigue firme, hemos aceptado que si somos parte del problema, también podemos ser parte de la solución.
  4. Vivimos momentos difíciles como país –como es usual en todo momento de transición–, pero no toda transición es para empeorar. La llegada de un nuevo gobierno la asumimos como una nueva oportunidad que debe de llenar de esperanza al país, si lo vemos de esa forma, bien podemos citar la máxima que estable que: “Nunca es más oscura la noche que cuando está por llegar el amanecer”.
  5. Celebramos con alegría que más personas, instituciones y oenegés estén expresando interés de participar y apoyar los esfuerzos de pacificación que desde hace dos años se vienen haciendo; sean bienvenidos, su aporte es valiosísimo y le hace falta al país, un desafío tan grande como lo es superar la violencia, solo será posible alcanzarlo si la nación entera se une alrededor de ese propósito, cada cual aportando desde su rol y capacidad, estrechando manos y no echando zancadillas, obrando y no solo criticando.
  6. En nuestra visión, el éxito del proceso requiere de la suma de seis componentes fundamentales: A) Voluntad y decisión política de todas las partes. B) Marco jurídico, para darle cobertura legal a las acciones que se emprendan y a los operadores que en el terreno trabajen por la paz. C) Recursos, para financiar los costos de los programas de prevención de la violencia en sus tres niveles. D) Sacrificios, buscando no lucrarse del proceso, ejemplo: que los porcentajes con los que operen las oenegés que intervengan no sobrepasen el 7%, de igual forma las instancias estatales que manejen esos fondos. E) Profundo amor por el país y su gente. y F) Honradez y genuino compromiso con la paz. Por nuestra parte, con excepción del marco jurídico y los recursos que no nos corresponden, estamos trabajando en potenciar todos los demás.
  7. Finalmente, queremos enviar un mensaje a los miembros de la corporación policial: Ustedes, al igual que nosotros, son miembros de las familias pobres del país, son trabajadores de la seguridad, vivimos en los mismos barrios y colonias y, en una gran mayoría de casos, nos unen lazos familiares; por tales razones, no los consideramos nuestros enemigos. Es falso que hayamos ordenado una campaña de ataques armados contra ustedes, lo que en verdad está sucediendo es que el discurso retador y confrontativo de quienes les dirigen ha provocado que algunos policías hayan malentendido la reforma al Código Penal interpretándola como licencia para matar a miembros de pandillas. Seis meses después de la reforma, 29 pandilleros han muerto por disparos de miembros de la corporación policial, en la mayoría de los casos el procedimiento policial es llegar disparando contra nuestros miembros o, como mínimo, golpeándolos; y cuando los capturan y los liberan, los llevan al terreno de la pandilla contraria, y ahí los sueltan para que los otros los maten creyendo que son provocaciones de la pandilla rival; con todo esto se ha provocado una situación de alta tensión entre policías y pandillas, y se está generando una situación delicada y equivocada donde ya se compite por quién dispara primero. Queremos recordarles que pasamos 15 meses sin que hubiera policías muertos porque nos comprometimos a ello y en consecuencia, hubo una actuación más profesional en la aplicación de los procedimientos policiales. Vuelvan a actuar profesionalmente, y nosotros contribuiremos con bajar la tensión que se ha desatado en los barrios y colonias.
El Salvador, 28 de abril de 2014 

Foto José Cabezas (AFP)
-------------------------------------------------------------
Lea además:

Vigésimoprimer comunicado de las pandillas

$
0
0

[Este comunicado lo vuelven a suscribir las pandillas Mara Salvatrucha 13, Barrio 18, Mao-Mao, Mara Máquina y La Mirada Lokotes 13 y un colectivo de reos civiles que se han sumado al proceso. Los retirados o pesetas siguen sin ser mencionados. Se hizo público en la mañana del 5 de junio, cuando fue distribuido vía e-mail, pero está fechado el 3 de junio. Es el primer comunicado de la era Salvador Sánchez Cerén.]

***

Los voceros nacionales de las pandillas: MS-X3, Barrio 18, Mao-Mao, Máquina, Mirada Locos 13 y privadas y privados de libertad de origen común al pueblo salvadoreño y demás pueblos del mundo, hacemos saber:
  1. Pasadas las elecciones del 9 de marzo del año en curso, las pandillas, maras, privados y privadas de libertad de origen común, fuimos de los primeros que saludamos la victoria del profesor Salvador Sánchez Cerén y de Óscar Ortiz, pese a que aún no se habían declarado en firme los resultados. Hoy que ya han tomado posesión de los cargos de presidente y vicepresidente de la República, queremos augurarles éxitos en la gestión, otorgarles el beneficio de la duda y reiterarles nuestra disposición y voluntad de contribuir en la solución del más grave problema que agobia al país –la violencia– en lo que esté al alcance de nuestras posibilidades.
  2. Se acaba de cerrar el período más complejo para trabajar por la paz en El Salvador; quienes estaban obligados a trabajar para alcanzarla más bien alimentaron la violencia y se alejaron cada vez más de la paz. Muestra de ello es que en el último año los índices de violencia, en lugar de seguir disminuyendo, se volvieron a incrementar. Ello solo reafirma lo equivocado que representa el querer combatir la violencia con más violencia; la zozobra con más zozobra, y la inseguridad con más inseguridad. Estamos en un nuevo momento, esperamos que sea de certidumbre, esperanza y de Paz.
  3. Llamamos al pueblo salvadoreño a no dar crédito a ningún tipo de rumores de “toques de queda”. Aclaramos que las pandillas y maras no hemos impulsado en los últimos días esas acciones ni pretendemos hacerlo; quienes se han dedicado a ello han sido mentes perversas que actúan con impunidad y que han pretendido crear un clima de zozobra, miedo y temor, para provocar odio y resentimiento hacia nosotros y así justificar la acción represiva y el accionar de grupos de exterminio, que en los últimos días han cobrado la vida de muchos de nuestros miembros, familiares y civiles. Esperamos que el nuevo gobierno enfrente con firmeza a esos grupos, tanto los que actúan desde fuera de la institucionalidad del Estado, como a los que lo hacen desde adentro.
  4. La oportunidad histórica para recuperar la paz que se abrió el 9 de marzo de 2012 aún sigue abierta; aprovecharla en beneficio del país depende de todos: gobierno, iglesias, empresarios, sociedad civil, autoridades locales y miembros de pandillas. Solo juntos, en un gran esfuerzo de nación, podremos construir la tan anhelada paz a la que aspira este sufrido pueblo.
  5. Finalmente, aprovechamos para responder públicamente a la carta que nos enviaron los Comandos de Salvamento, de fecha 5 de mayo del corriente año, solicitando facilidades para el buen desempeño de su trabajo humanitario; en consecuencia de lo anterior, les informamos que en reconocimiento a la excelente labor que ustedes realizan ya estamos tomando cartas en el asunto y orientando a nuestros miembros en los territorios para que les brinden todas las facilidades y el apoyo necesario para que ustedes puedan prestar eficaz y oportunamente su servicio humanitario.
El Salvador, 3 de mayo de 2014

Foto Fred Ramos (El Faro)

-------------------------------------------------------------

Lea además:

Déjà vu sobre la legítima defensa

$
0
0

Foto Roberto Valencia

‘Reformarán figura de la legítima defensa’, destacaba el titular, y el artículo decía así:
Reformas a la figura de la legítima defensa para que cuando una persona actúe contra un delincuente no sea llevada a la cárcel, aprobará la Comisión de Legislación de la Asamblea Legislativa. El presidente de la referida comisión, Walter Araujo, informó que se están estudiando modificaciones al Código Procesal Penal para proteger a los ciudadanos que, en defensa propia, de sus bienes o de su familia, se ven involucrados en actos considerados por la legislación como delitos culposos. (…) Sin embargo, debido al incremento de la delincuencia y casos de personas que son detenidas por defenderse contra los ladrones, el diputado Araujo indicó que no se puede esperar a que entre en vigencia la nueva legislación penal, por lo que es necesario reformar el código vigente. (…). Los abogados Alfredo Clará y Miriam Mixco presentaron al Congreso un proyecto de reformas al Código Procesal Penal para que el juez pueda sustituir la detención provisional por un arresto domiciliario en caso de legítima defensa. (…). Existen suficientes casos para demostrar que es imprescindible enviar un mensaje claro a los delincuentes y proteger a los ciudadanos honestos, para lo cual es indispensable regular la defensa propia.
Esta nota es de hace casi veinte años. Se publicó el jueves 25 de mayo de 1995 en El Diario de Hoy, pero bien podría haberse escrito el 23 de julio de 2014, un día antes de que 48 diputados de derecha aprobaran una reforma que –aunque no lo planteen así– busca que los hombres y las mujeres que tienen un arma se sientan en mayor libertad de utilizarla contra los “delincuentes” sin que siquiera sean llevados a una delegación policial por ello. Se apela a que solo beneficiará a los ciudadanos honestos y honrados, pero estamos en El Salvador y no en Suiza, y los jueces con demasiada frecuencia miden la ‘honradez’ y la ‘honestidad’ en función de las influencias ante el Poder Judicial del procesado o del dinero que tiene para pagar un buen abogado.

La reforma es un claro retroceso si este país tiene como objetivo convertirse algún día en un pleno Estado de derecho, pero el ambiente está caldeado y la han envuelto con nobles ropajes: ‘ciudadanos honrados versus delincuentes’, ‘legítima defensa’, ‘protegerse de los mareros’… Oponerse, con la que está cayendo, suena pecaminoso, y quizá hasta con eso están jugando algunos, pero yo espero que el presidente de la República ejerza su capacidad de veto.

Seguro que no ganaré el premio al bloguero más popular de El Salvador, pero no quiero que mis hijas crezcan en una sociedad en la que el Estado tolera que un hombre armado responda con tres balazos en la cabeza a una persona que navaja en mano roba celulares en un autobús, por censurable que sea el acto de robar (y conste que yo seguido viajo en bus). No quiero una sociedad en la que el hijo de papi –o el propio papi– se sienta con las manos libres para vaciar su cargador contra otro porque sabe que lo respalda un bufete jurídico al que poco le costará fabricar la “legítima defensa”.

Quien me late que sí está satisfecho con la reforma aprobada al Código Procesal Penal, y más que lo estará si Salvador Sánchez Cerén no impide que entre en vigor, será el editorialista de El Diario de Hoy. Lleva dos décadas esperándolo.

Animalistos

$
0
0

ACLARACIÓN NECESARIA: Esto que va a leer no nació con vocación de post para este blog. Los siguientes cinco párrafos y el .JPG del tuit original los pegué en un inicio en mi página de Facebook el 2 de agosto, como respuesta al linchamiento social del que fui objeto el día anterior de parte de un grupo de simpatizantes de la oenegé Asociación al Rescate de los Animales (ARANI), alentados por la o las personas que manejan las cuentas sociales de este grupo. No contentos con sus insultos y difamaciones originales, denunciaron ante Facebook esta respuesta que ustedes van a leer apenas termine este párrafo, y el o los lumbreras que gestionan Facebook decidieron eliminarla y sancionarme con 24 horas sin poder publicar nada. Creo que dejarlo así sería permitir que este grupúsculo de fanáticos descerebrados (me refiero a los que promovieron la censura, no a todos los simpatizantes de ARANI ni a sus dirigentes; quiero pensar que ellos ya están conscientes de que esto se les salió de las manos, y algo habrán aprendido de este incidente) se salga con la suya. Por eso publico ahora en este blog mi respuesta tal cual vio la luz el 2 de agosto, sin mover ni una coma. Soy juez y parte, y seguramente mi juicio esté nublado, por lo que les invito a que lean y juzguen ustedes si esto ameritaba ser censurado. Gracias.


***



En las últimas 24 horas en Twitter y Facebook me han llamado ‘mierda’, ‘pobre perro’, ‘patán’, ‘idiota’, ‘pobre de mente’, ‘pendejo’, ‘ignorante’, ‘estúpido periodista’, ‘maltratador de animales’, ‘mediocre’, ‘maje con caca en la cabeza’, ‘puto’, ‘atropellador de perros’, ‘HDP’… ¿Un grupo de fascistas enojados con algún reportaje? No. Quienes así me han insultado dicen ser personas que promueven el respeto hacia los perros y los animales en general… aunque me late que reprobaron la materia de respeto hacia los seres humanos.

El detonante de la avalancha es este tuit que escribí el 27 de julio. No es un tuit del que me siento orgulloso, pero con él pretendía nomás explicitar mi perplejidad por haberme topado el día anterior con un grupo de activistas del ‘animalismo’ que pedían dinero en el redondel Beethoven, en San Salvador. Era un grupo numeroso y organizado, con megáfono y fanfarria, compuesto mayoritariamente por jóvenes de clase media-alta, deduje por sus ropas, maquillajes y peinados. Obvio que 140 son muy pocos caracteres, pero lo que quise explicitar es mi convicción de que muchas de esas jovencitas (había pocos jovencitos) seguramente provienen de colonias clasemedieras (media y media-alta) en las que tienen a empleadas domésticas a las que pagan, con suerte, $200 al mes. Muchas de esas empleadas solo tienen un día libre cada quincena. Muchas tienen hijos que se están criando sin la presencia de su madre (y luego ponemos cara de perplejidad si se integran en una pandilla). Y algunas de esas empleadas, me consta, son tratadas peor que el perro de la familia. Esa incoherencia y doble moral a mí me molesta, y la quise explicitar en el tuit, consciente de que, dentro de los ‘animalistas’ habrá personas dignísimas (pobres y adinerados), que se desloman por una causa noble, y consciente también de que cuando yo generalicé en esos 140 caracteres estaba siendo injusto con ellos. Pido sinceras disculpas a esas personas, pero el torrente de insultos me reafirma en la generalización de que algo huele a podrido en el movimiento ‘animalista’ salvadoreño.

Porque la campaña no fue casualidad.

El tuit lo escribí el 27 de julio y pasó sin pena ni gloria hasta ayer, 1 de agosto. Es también motivo de preocupación que esta campaña de instigación de reminiscencias fascistas la organizó –cuatro días después, reitero– una asociación que se llama Arani El Salvador, que curiosamente también se jacta de querer construir una sociedad mejor promoviendo leyes de protección a los animales. Desde su cuentas en redes sociales alentaron en mi contra a su ‘barrabrava’ ("Amig@s Animalistas, ayúdennos por favor a explicarle al periodista Roberto Valencia #cguanacas la relación entre...”) hasta en seis ocasiones (tres en Twitter, tres en Facebook), sugiriendo de forma explícita que yo soy un maltratador de animales, cuando toda mi vida me he pronunciado contra el maltrato animal, y no solo practico el respeto, sino que trato de inculcárselo a mis hijas y a las personas que me rodean.

Disculpen el desahogo. Termino ya. Uno sabe que la salvadoreña es una sociedad ultraviolenta y por mi trabajo estoy expuesto a la crítica (y así debe ser), pero, por lo mismo que uno nunca se esperaría que un linchamiento social pueda provenir de gente que dice defender los valores de Gandhi, reconozco mi desconcierto porque sean ‘animalistas’ quienes, en nombre de una sociedad mejor, me insultan y me difaman como creo que nunca antes me había pasado.



Felicidad sin MasterCard

$
0
0

Pasajes en la Ruta 52 desde Galerías hasta el Parque Infantil: 2 x $0.20
Una rigua* recién hecha: $0.50
Sodas en bolsa: 2 x $0.25
Boletos para la Chicago* más alta del campo de la feria de la Don Rúa: 2 x $0.50
Boleto para rueda de caballos: $0.50
Bote de burbujas con silbato incluido: $1.00
Bolsa de agua: $0.15
Pasajes en la Ruta 101-D desde el Centro hasta la 79ª avenida Sur: 2 x $0.20

Resultado:

Hay ciertas cosas que el dinero no puede comprar. Para todo lo demás, tampoco se necesita la MasterCard.

----------------

* Rigua. 1. f. El Salv. Tortilla de elote* tierno.
* Elote. (Del náhuatl élotl). 1. m. Mazorca tierna de maíz, que se consume, cocida o asada, como alimento en México y otros países de América Central.
* Chicago. Nombre con el que en El Salvador se reconoce a las norias.

Mágico, Maradona y el Barça

$
0
0

Foto: Internet

Se nos desparramó el Mundial encima, y a los salvadoreños nos toca elegir, por octava ocasión consecutiva, entre depositar nuestras ilusiones en banderas de colores ajenos o rescatar hazañas pretéritas. Desde España 1982, con aquella selección imposible abanderada por Jorge Mágico González y surgida en el fragor de la guerra civil –y esto no es licencia literaria–, el fútbol salvadoreño no sabe lo que es un Mundial, y mucho tendrán que cambiar las cosas para.

Resignado y contagiado por el espíritu mundialista que el sistema nos impone, antes que sudar calenturas ajenas prefiero alinearme con los que rescatan hazañas, y por eso quiero hablarles tantito sobre el más grande los futbolistas que ha parido el país, aquel genio bohemio que incluso en las Españas –me atrevo a suponer– pocos habrán olvidado entre los que superan las cuatro décadas; aquel genio bohemio que cuesta imaginárselo con otra camisola que no sea la amarilla del Cádiz, pero que llegó a vestir la de FC Barcelona, lo que ha alimentado interpretaciones de todo tipo, la mayoría sin sustento real alguno.

Por partes.

Naranjito se le atragantó a nuestra Selecta: tres derrotas en tres partidos, incluida la mayor goleada que jamás se ha encajado en un Mundial, un 10-1 ante Hungría que ha quedado marcado como cicatriz en la conciencia nacional. Pero Mágico brilló y, dos semanas después de que Dino Zoff levantara la copa para Italia, el salvadoreño aterrizaba en Jerez de la Frontera para incorporarse en su nuevo equipo: el modesto Cádiz CF.

La 1982-83 fue una temporada brillante para Mágico, pero deslucida por militar en Segunda División. La 1983-84, ya en la máxima categoría, fue la del destape, con el mérito infinito de quedar tercero en el Trofeo Pichichi en un equipo que volvió a descender. Para mayo de 1984, cuando Europa calentaba motores para la Eurocopa, se daba por hecho que Mágico dejaría Cádiz. La prensa publicó que el París Saint Germain, el Hellas Verona (campeón italiano en la 1984-85) y el Atalanta presentaron ofertas por el salvadoreño durante el parón estival, y se especuló –y hoy muchos lo dan por hecho– que el FC Barcelona también quiso ficharlo. Lo que no es especulación es que Mágico vistió la camisola del Barça en dos partidos amistosos disputados en Estados Unidos.


En los dos choques ligueros previos, vestido de amarillo, Mágico había jugado sendos partidazos ante el Barça, en los que firmó dos goles de ensueño (sobre todo el primero, en el que arranca desde su campo y ridiculiza a Alexanko, a Migueli y a Urruti). Ese desempeño, he leído en más de una ocasión, es el que llevó a César Luis Menotti a querer probar al salvadoreño, para ver cómo se acoplaba en “un grande”, y para conocer de primera mano la indisciplina y el pasotismo que ya habían dado tantos titulares en los diarios como sus goles y jugadas imposibles. Las imágenes de Mágico vestido de azulgrana a la par de Diego Armando Maradona parecen ser la prueba irrefutable del intento del Barça por fichar al Mago.

Pero no.

Yo no sé si Menotti alguna vez consideró en serio su fichaje, pero sí sé que la minigira que el salvadoreño hizo con el Barça no era para probarlo. El técnico argentino, de hecho, ni siquiera dirigió el equipo en aquellos dos partidos.

Entonces, ¿por qué el FC Barcelona se lo llevó de paseo? Ahora ya no se estila hacerlo, pero en la década de los ochenta, sí. Mágico fue invitado como refuerzo puntual, cuando empresarios estadounidenses contrataron al equipo catalán para disputar en Nueva York la Copa Transatlántica, junto a el Udinese italiano, el Fluminense brasileño y el local New York Cosmos. Aquel cuadro blaugrana era, por así decirlo, el Barça B (para finales de mayo seguía disputándose un torneo oficial, la extinta Copa de la Liga, de la que el Cádiz ya había sido eliminado) reforzado con figuras de otros clubes de la Liga española y dirigido por Rogelio Poncini, la mano derecha de Menotti. También fueron invitados a la gira Miguel Tendillo (Valencia CF) y los argentinos Juan Alberto Barbas (Real Zaragoza), y Mario Husillos (Real Murcia), pero solo llegaron a buen puerto las negociaciones con Husillos y Mágico, solicitado efusivamente por el contratistas gringos por el peso creciente de la comunidad salvadoreña en la Costa Este. La inclusión de Maradona en el “Barça B reforzado” que viajó a Nueva York –también la de otros titulares habituales como Migueli y Clos– se explica porque un mes antes el Pelusa había sido sancionado por cuatro meses, tras protagonizar una tangana en la final de la Copa del Rey disputada –y perdida– ante el Athletic de Bilbao. Aquella sanción impedía a Maradona disputar partidos oficiales, pero no torneos amistosos, como lo era la referida Copa Transatlántica.

Pero Mágico no fue a probarse con el FC Barcelona. Basta leer la crónica del enviado especial del diario catalán El Mundo Deportivo publicada el 27 de mayo:
Mágico González, el crack cadista, llevaba tres camisetas en el equipaje: una amarilla de recuerdo, otra azulgrana para el “bolo”, y la del París Saint-Germain, bien dobladita, para el regreso. "En cuanto vuelva me voy a París, a pasar el reconocimiento médico, y en seguida a firmar", dijo. Su “mágica” gira puede acabar en a torre Eiffel, por lo menos.
Para entonces se daba por hecho su fichaje por el PSG, muy a pesar de los deseos de Mágico, como se encargó de explicitar al aterrizar el Barcelona en la mañana del martes 5 de junio. Así lo consignó El Mundo Deportivo en su edición del día siguiente:
Todos los ojos pendientes de Maradona, y el primero en salir fue Mágico González. Como una centella se fue a enlazar con el avión que debía transportarle a Sevilla. El salvadoreño estaba entre feliz y triste, y explicaba el porqué de su doble estado anímico: “Estoy satisfecho porque para mí ha sido todo un honor ser invitado por un club como el Barcelona a esta gira, y sobre todo por haber podido jugar al lado de Maradona. No obstante, me siento algo decepcionado de tener que dejar España. Esta semana probablemente firmaré por el París Saint Germain y me enrolaré al fútbol francés. El dinero tiene la culpa de que no me haya quedado aquí”.
Sobre la Copa Transatlántica –un extraño torneo a dos partidos, con una semana de diferencia entre el primero y el segundo–, lo reseñable sucedió en el segundo encuentro, jugado el domingo 3 de junio ante el Fluminense. Maradona y Mágico salieron de partida. El segundo gol del Barça lo firmó el salvadoreño, asistido con maestría por el argentino. El partido terminó 2-2, hubo penaltis para definir al ganador, y los dos anotaron sus lanzamientos, con lo que contribuyeron a la victoria. Fue una oscura pero digna despedida para ambos. Ninguno de los dos vestiría nunca más la camisola blaugrana.

Maradona regresó a Barcelona para hacer maletas y volar a Nápoles, ciudad en la que construyó una leyenda.

Mágico regresó a Cádiz, logró abortar su fichaje por el PSG, y terminó de construir su propia leyenda en la Tacita de Plata.

Conozco Nápoles, viví un año en el sur de Italia, y sé del grado de idolatría que los napolitanos sienten por Maradona. Pero me atrevo a plantear que no supera el que los gaditanos sienten hoy por Mágico González. Lo que está claro es que grandes jugadores ha habido, hay y habrá, pero ganarse a perpetuidad el cariño de una afición está reservado para un puñado de elegidos. Por un cúmulo de casualidades, dos de esas excepciones coincidieron aquella tarde de junio de 1984 en el desaparecido Giants Stadium de Nueva York, los dos vestidos con la camisola del Barça.


---------------------------------------------

(Este texto se publicó primero el 14 de junio de 2014 en Bajomundo, mi blog de la revista Frontera D, bajo el título 'Mágico, Maradona y el Barça')

Vigésimo segundo comunicado de las pandillas

$
0
0

[Este comunicado lo vuelven a suscribir las pandillas Mara Salvatrucha 13, Barrio 18, Mao-Mao, Mara Máquina y La Mirada Lokotes 13 y un colectivo de reos civiles que se han sumado al proceso. Los retirados o pesetas siguen sin ser mencionados. Se hizo público en la tarde del 29 de agosto de 2014, cuando fue distribuido vía e-mail, pero está fechado un día antes. Es el primer comunicado desde el repunte de asesinatos que ha llevado a que durante cuatro meses consecutivos el promedio diario de asesinatos en El Salvador supere los 11 diarios, cifras similares a las que se tenían antes del inicio de la tregua, en marzo de 2012.]
***

Los voceros nacionales de las pandillas MS-X3, BARRIO 18 (Sureños y Revolucionarios), Mao-Moa, Máquina, Mirada Locos 13 y privados y privadas de libertad de origen común al pueblo salvadoreño y demás pueblos del mundo hacemos saber:

1- Que en los últimos días hemos compartido profundas y largas reflexiones a nivel nacional con nuestros compañeros privados /as de libertad, y con todos aquellos que se encuentran en situación de libertad, ya sean estos activos, retirados, colaboradores y simpatizantes, y hemos concluido que la situación de violencia que agobia al país –de la cual todos resultamos ser víctimas– no puede experimentar resultados positivos si no damos nuestra decidida colaboración, pues como ya lo hemos dicho en innumerables ocasiones, si nosotros somos parte del problema, también podemos ser parte de la solución, y eso ya lo hemos demostrado con mucho éxito, aun en contra de toda la oposición y las adversidades que este Proceso de Paz ha enfrentado.

2- Consecuentes con la anterior afirmación, queremos informar que por iniciativa propia hemos decidido dar inicio a partir del domingo 24 de agosto a una segunda etapa del Proceso de Paz iniciado el 9 de marzo de 2012. Esta segunda etapa considera lo siguiente:


  • a) Renovación y reafirmación de los cinco compromisos iniciales: 1), Cesar todo tipo de hostilidades entre los miembros de pandillas. 2) Cesar acciones contra miembros y familiares de la FAES. 3) Cesar acciones contra miembros y familiares de la PNC. 4) Cesar acciones contra miembros y familiares de Custodios del sistema penitenciario. Y 5) Evitar al máximo la generación de víctimas civiles, llámese motoristas, cobradores, pasajeros y otros.
  • b) Profundizar los pactos por la vida y por la paz que se generaron en la primera etapa en los once municipios que se sumaron al proceso de Municipios Libres de Violencia, en los cuales, nos comprometimos a la erradicación gradual de todo tipo de delitos en los que participen miembros de pandillas. De igual forma, profundizar nuestro compromiso con las comunidades de la Zona Escalón, a la cual la declaramos: Zona de Paz.
  • c) Cesar todo tipo de acoso a los centros escolares y declarar estos como zonas de paz.
  • d) Suspender el reclutamiento forzoso.
  • e) Ampliar nuestro compromiso de ofrecer garantías para que puedan realizar (sin obstáculos) su trabajo los organismos humanitarios de socorro en las zonas donde tenemos presencia, este compromiso incluye a Comandos de Salvamento, Cruz Roja (nacional e internacional), Cruz Verde, socorristas diversos y ambulancias del seguro social y de la red de hospitales públicos; así mismo, a las brigadas del sistema de salud que realizan operaciones de fumigación para combatir criaderos de zancudos.
  • f) Respetar y apoyar el libre y pleno desarrollo de los proyectos y programas que la Cooperación, Las Municipalidades, las Iglesias y las Ongs desarrollan en las comunidades para reinsertar social y productivamente a los jóvenes.
  • g) Seguir realizando esfuerzos para mantener un clima armónico y de paz en los Centros Penitenciarios a fin de evitar que las condiciones infrahumanas del internamiento provoque situaciones de violencia que atenten contra la seguridad y la vida de la población reclusa.


3- Concebimos este nuevo esfuerzo como una segunda oportunidad para que el país pueda alcanzar la paz, razón por la cual hacemos un llamado a todos los actores sociales a apoyarlo:

  • Al gobierno de la Republica a brindar facilidades para que entes de la sociedad civil e Iglesias puedan facilitar el dialogo y la comunicación necesaria para dirimir conflictos domésticos y cotidianos que aseguren el éxito del Proceso de Paz en esta segunda etapa.
  • A los detractores, que defienden los intereses de los que se lucran de la violencia, les exhortamos a adoptar una actitud más patriótica, no pueden seguir favoreciendo la acumulación de riquezas a costa del sufrimiento, la sangre y las vidas que arrebata la violencia a los más humildes de este pueblo, denle una oportunidad a la paz.
  • Al Ministerio Público y la PNC, les pedimos que no nos criminalicen solo por el hecho de ser jóvenes y que en el impulso de la modalidad de Policía Comunitaria, tengan sumo cuidado de no provocar confrontación entre las comunidades y los jóvenes; donde esta modalidad ha funcionado (al norte de Ciudad Delgado y El Pino en Santa Tecla) es donde el Policía se ha convertido en agente de cambio y de apoyo a la comunidad y es así como se ha ganado la confianza de la gente, porque la confianza se construye paso a paso, no se ordena ni decreta.
  • A los medios de comunicación les exhortamos a no sobredimensionen la situación de violencia, a que promocionen no solo los hechos violentos, sino también todas aquellas acciones positivas que desarrollamos los jóvenes, no olviden que la situación de violencia es también un asunto de percepción y esa la generan ustedes con sus noticias y esa es la imagen del país que se proyecta tanto interna como externamente, entonces pues, ustedes también tienen responsabilidad en la situación del país, si es más o menos violento, también dependerá de cómo ustedes comuniquen lo que acontezca.
  • A los miembros de los partidos políticos, les exhortamos a no perder la seriedad y la responsabilidad en el manejo del tema de la violencia, motivados por intereses de tipo electorero, impulsando iniciativas que en lugar de prevenir y disminuir violencia más bien la estimulan y alejan la posibilidad de alcanzar la paz. Por el contrario, les invitamos a apoyar el proceso de Paz y les aseguramos que con ello obtendrían mayor apoyo político que el que buscasen mediante acciones populistas.

4- Finalmente, queremos expresar nuestro más profundo agradecimiento a los facilitadores de este Proceso de Paz, que desde sus inicios nos han exhortado a seguir adelante, a no desmayar, a no perder la fe y la confianza, a no volver al pasado. Ellos nos enseñaron que el horizonte de nuestras vidas no se podía limitar a la cárcel, el hospital o el cementerio, nos enseñaron también la cuarta opción de la reinserción social y productiva mediante el abandono de la violencia, gracias mil por esas enseñanzas y porque han confiado en nosotros y nos han exhortado a dar este nuevo paso que inició el 24 de agosto, a todos les decimos que haremos todo lo posible para no fallar, pero también les recordamos, que esta es tarea de todas y todos los salvadoreños.

El Salvador, 28 de agosto de 2014.

Foto: Roberto Valencia
-------------------------------------------------------------

Lea además:

Francisco desde los cielos habla sobre Monseñor Romero

$
0
0

Tarde del lunes 18 de agosto de 2014. El portavoz de la Santa Sede, el jesuita Federico Lombardi, cede la palabra a Philip Pullella, periodista de la agencia Reuters especializado en temas del Vaticano. Pullella felicita primero a Francisco por su inglés, aprovecha para solicitarle veladamente una entrevista, y por último interpela: “¿Cómo va el proceso de Monseñor Romero? ¿Cómo le gustaría que concluyese?”.

Se refiere a Óscar Arnulfo Romero y Galdámez (1917-1980), el arzobispo de San Salvador asesinado de un disparo en el pecho mientras oficiaba misa en la capilla de un hospital para enfermos terminales de cáncer, y cuyo proceso de beatificación está fondeado en Roma desde el año 1996.

La entusiasta respuesta del papa Francisco se desparrama en un minuto, pero no dice nada nuevo; recuerda que la causa está desbloqueada, reitera su creencia en que fue “un hombre de Dios”, y explica que el caso sigue anclado en la Congregación para la Causa de los Santos. Lo único novedoso de su alocución quizá sea el emplazamiento a los postuladores: “Depende de cómo se muevan. Es muy importante que lo hagan con rapidez”.

Poca sustancia, la verdad, pero son palabras papales.

Francisco habla desde el cielo sobre el mártir al que cientos de miles en El Salvador –y fuera de– llaman y veneran como ‘San Romero de América’. Y lo de hablar desde el cielo no es licencia literaria: la conferencia de prensa se celebra a bordo del Airbus A330 de Alitalia que lo lleva de regreso a Roma, tras cinco días en Corea del Sur.

Poca sustancia, pero son palabras papales. Y la referencia al salvadoreño más universal resulta más que suficiente para que el ‘Paisito’ regrese a la agenda mediática internacional, con la satisfacción de que el repentino interés en las redacciones de medio mundo no se deba a un terremoto, a un huracán, a las maras o a desgracias similares.


Foto: AP
------------------------------
[Esta es la escena inicial que escribí para una nota sobre Monseñor Romero que me pidieron de la BBC británica, y que salió publicada el 25 de agosto de 2014… con una entrada menos ‘narrativa’]

'Yo violada' sigue rodando

$
0
0

Ayer (30 de septiembre de 2014) pegaron en la página de Facebook de la revista El Malpensante el link a la versión colombiana de la crónica 'Yo violada', que ellos publicaron en su edición de julio de 2013. Más de un año después, más de tres años desde su publicación original, sigo sorprendiéndome con la avalancha de laiks, de comentarios sentidos, de reacciones que aún genera este relato descarnado.

Si están sobrados de tiempo, en tren y lean los comentarios de la gente.





[Aviso técnico: si no viera nada en este post, sería responsabilidad exclusiva de Facebook y sus configuraciones.]

Carta de Raúl Mijango a la nación

$
0
0

Foto Roberto Valencia

[Es la primera vez que Rául Mijango, exguerrillero y exdiputado por el FMLN (1997-2000) recoge sus impresiones sobre el proceso iniciado en marzo de 2012 en un comunicado que firma a título personal.]

***
En especial: al Estado y Gobierno salvadoreños, miembros de pandillas, privados/as de libertad de origen común y a todos los miembros que integran el nuevo ‘Consejo Nacional de Seguridad Ciudadana y Convivencia’.

“El mal solo perdura cuando los hombres buenos no hacen nada”
Albert Einstein

Atendiendo el sentir y clamor desesperado de la ciudadanía y con el propósito de contribuir a responder a las expectativas de paz de todos los salvadoreños/as, y para evitar que aquellos que hoy se expresan en pro de ella vayan a caer en situación de desgaste predicando solo buenas intenciones pero carentes de propuestas y acciones concretas mientras la situación de violencia sigue igual o peor, quiero, desde la humildad de mi condición de ciudadano, sugerir a todos los que pueden contribuir en la solución de este conflicto, el inicio cuanto antes de un diálogo sincero, valiente, constructivo e incluyente que considere también a las pandillas. Es hora de deponer posiciones principistas como la de que “no se puede hablar con criminales”, cuando en este caso, ellos pueden contribuir a la solución del problema. De hecho, el mismo Estado ya lo hace por medio de la Fiscalía desde hace tiempo, al ofrecer beneficios penales a los delincuentes por su colaboración. No debemos olvidar que posiciones anacrónicas como estas son las que en el pasado provocaron que el conflicto armado de los ochenta se prolongara por tanto tiempo y cobrara la pérdida de miles de vidas y más y mayor destrucción del país. Fue hasta que se dialogó con los “delincuentes terroristas o terengos”, como nos llamaban, que se logró la paz.

A fin de volver proactivo y productivo el diálogo sugerido, separado de toda burocracia que produce libras de papel para llenar bolsones, propongo un mecanismo de abordaje real y concreto de la problemática. El mecanismo consiste en desarrollar una “agenda trenzada, de desarrollo simultáneo de manera unilateral”, que posibilite construir propuestas que se puedan convertir en entendimientos o acuerdos –porque un diálogo sin entendimientos no tiene ninguna validez– que permitan ir superando de manera gradual y progresiva la situación de violencia que afecta a todos los salvadoreños/as, para irle devolviendo a nuestro querido país la paz y la tranquilidad que tanto anhelamos.

Por la necesidad de actuar con el mayor sentido de responsabilidad, dado el valor estratégico de la propuesta, no voy a incluir en esta carta los contenidos de la agenda que propondré. De manera privada, la haré llegar al Consejo Nacional de Seguridad Ciudadana y Convivencia, así como a las pandillas, para que la analicen y se pronuncien sobre su contenido, en cualquiera de las formas: si la aceptan, la modifican o la rechazan; solo así se podrá medir el grado de genuinidad del espíritu de paz con el cual dicen actuar. Pido a los medios de comunicación su comprensión y respeto al derecho a la privacidad que un asunto tan delicado como este requiere; dejo a los destinatarios de la misma la opción de hacer, o no, público su contenido.

No se puede seguir ocultando o minimizando la realidad: la violencia, la inseguridad y la criminalidad representan desde hace varios años el principal problema que aqueja a los salvadoreños; y no es para menos, la vida de un poco más de 53,000 compatriotas se ha perdido en los últimos 20 años por estas causas. Según algunos estudios, $2,000 millones se pierden por año en el país por efecto de la violencia. Por la misma situación de inseguridad, nuestra economía se constriñe y su crecimiento anual no sobrepasa el 2%. La población –principalmente la que vive en los barrios y colonias menos favorecidas– vive angustiada, presa del temor y con la zozobra permanente de ser víctima –ella o sus hijos– de algún acto delictivo en su casa, la colonia, la calle, en el bus, la escuela, la cancha deportiva, en el centro de trabajo, hasta en la iglesia a la que asiste, inclusive.

Desde que el fenómeno de violencia –principalmente la juvenil– comenzó a golpear con mayor fuerza a la nación, en miles se pueden contabilizar las cuartillas que se han emborronado con estudios, análisis y diagnósticos tratando de caracterizar el fenómeno. Decenas de miles de dólares se han pagado a expertos para que “analicen” la situación y sugieran soluciones. Estamos pues, ante un fenómeno que está sobreestudiado y diagnosticado. Pero nada de eso ha dado resultado, la violencia ha crecido de manera indetenible; tanto, que hemos alcanzado en años anteriores los 70 homicidios por cada 100,000 habitantes; más de 4,000 asesinatos por año, y una tasa de entre 12 y 14 homicidios diarios, lo cual nos ha colocado como el segundo país más violento de toda la Tierra.

La cooperación externa, de acuerdo a estudios que han circulado en últimos días, estima haber invertido en El Salvador en los 12 años anteriores en programas de prevención de violencia cerca de $700 millones (un promedio de $58 millones por año). La empresa privada ha revelado recientemente que su inversión anual en programas de responsabilidad social empresarial, sobrepasa los $600 millones por año, monto del cual invierte buena parte en programas de reducción de vulnerabilidades y prevención de violencia. Las municipalidades reciben el 8% anual del presupuesto general de la República, $350 millones aproximadamente, del cual se supone invierten una parte en desarrollo y prevención de violencia. El presupuesto del Ministerio de Justicia y Seguridad Pública sobrepasó los $350 millones en el año 2014. Toda esta inversión y qué resultados se han obtenido. Solo más violencia.

La falta de eficacia en la acción para prevenir, contener y disminuir violencia se debe a que todos los que hasta hoy han intervenido en el tema para encontrar soluciones han estado orinando fuera de la bacinica. Han pretendido resolver problemas nuevos con viejas recetas y, en muchos casos, no han tenido la voluntad genuina de querer resolverlos, o les ha faltado la suficiente valentía moral para desarrollar acciones que podrían ser “mal vistas”. Con pocos recursos y en poco tiempo, el proceso de pacificación derivado de la tregua experimentó resultados exitosos. Hizo posible reducir la tasa de homicidios de 14 a 5 diarios en cuestión de días y, a lo largo de 15 meses, ha impedido que se perdiera la vida de alrededor de 6,080 salvadoreños.

Con la llegada del nuevo Gobierno –surgido de elecciones en segunda vuelta en marzo de 2014– al fenómeno de la violencia se le ha dado mayor énfasis en su tratamiento si se le compara con el que le dio el Gobierno anterior. El mismo presidente Salvador Sánchez Cerén, en su discurso inicial, ofreció ponerse al frente de un programa contra la violencia.

En pantallas de televisión, micrófonos de radios y en periódicos escritos y digitales se puede ver, escuchar o leer las constantes declaraciones del ministro de Justicia y Seguridad, Benito Lara, sobre el tema de seguridad. Nadie puede hoy aducir que éste esté siendo ignorado, además, dicho sea de paso, con un buen manejo mediático, cargado de buenas voluntades y deseos. No obstante el rimbombante manejo que se ha hecho del despliegue de la ‘Policía Comunitaria’, la cual se ha pretendido vender como “la pastilla que cura todos los males”, la situación operativa no parece cambiar. Las acciones de ‘Mano dura’ continúan dominando el accionar policial, siguen con los grandes operativos y capturas masivas y más pandilleros continúan falleciendo en los supuestos ataques a la Policía.

Las pandillas y los privados/as de libertad de origen común también han mantenido la retórica de expresar buenas voluntades y de querer contribuir en la solución del grave problema de violencia; de la cual no solo se consideran victimarios, sino, víctimas también. No obstante, la situación de seguridad en las calles y colonias se sigue deteriorando cada día desde que hubo cambio de ministro en mayo de 2013. La tasa de homicidios se ha recuperado de 5 diarios en 2012 y 2013 a un promedio de 12 en la actualidad. Solo en lo que va de este año han sido asesinados 33 policías y 18 soldados. Ha resurgido con fuerza el homicidio de motoristas, cobradores y comerciantes. Según fuentes policiales, en este año los fallecidos por causas de la violencia sobrepasan los 3,000. Los centros escolares sufren nuevamente del acecho y el asedio a los estudiantes y maestros. El reclutamiento, la adquisición de armas, la disputa y expansión de territorios se han recrudecido en los últimos días y, muy a menudo, se conoce de la quema o ametrallamientos de unidades del transporte público.

Entre más policías y soldados fallezcan en acciones donde hay clara participación de pandillas y entre más pandilleros y mareros mueran en acciones donde ha participado la Policía, más se obligan ambos a mutar y a elevar la escalada de la confrontación bélica, favoreciendo así únicamente a los que están en contra de la paz y a favor de la guerra, porque se lucran de ella. Con otros actores, ese camino ya fue recorrido en el siglo pasado en El Salvador con nefastas consecuencias, no volvamos a cometer los mismos errores. Entonces, ¿cómo se resuelve esto? Ya está de sobra probado: dialogando y concertando. No dejemos que la maldad, la cobardía, el cálculo político y lo emocional, nos obligue a repetir una historia que nadie quiere volver a vivir.

El 29 de septiembre de 2014, emulando experiencias de otros países, y de anteriores administraciones, donde esta modalidad solo ha producido modestos resultados, se le dio partida de nacimiento a un nuevo ‘Consejo Nacional de Seguridad Ciudadana y Convivencia’, para que trabaje alternativas contra la violencia. Por la necesidad urgente de contar con alternativas a este flagelo, debemos de trabajar para que en El Salvador este Consejo no fracase y, para ello, es necesario otorgarle el beneficio de la duda y brindarle todo el apoyo que sea posible y necesario.

No obstante, este Consejo debe entender que lo que todos esperamos de él son propuestas realistas de solución, y no que sus voceros pierdan el tiempo en cuestionar, descalificar y desmarcarse del proceso que fue iniciado en 2012. Criticar ahora la tregua y el proceso de pacificación derivado de ella, con sus aciertos y desaciertos, sin proponer alternativa, es caer en condiciones de miseria humana. Más bien, el Consejo debe emprender cuanto antes, acciones que den resultados en el menor tiempo posible. La población espera con impaciencia para ya, no para dentro de dos, tres, cuatro o cinco años, resultados que se traduzcan en más seguridad, menos homicidios, menos extorsiones, menos robos, menos hurtos, menos desapariciones. En cuestiones de seguridad pública, el tiempo que se pierde no es oro, sino vidas humanas.

El Salvador, 30 de octubre de 2014.

-------------------------------------------------------------

Lea además:

Prólogo del e-book 'Yo bajomundo'

$
0
0

Ocurre con demasiada frecuencia. A pesar de las cifras espeluznantes, de los cadáveres exhibidos con cinismo en los noticieros, a pesar de las residenciales amuralladas y de las casas fortificadas, de la cotidianidad moldeada por la violencia, de los espacios públicos perdidos, de las incontables renuncias, a pesar incluso de que desde hace años Naciones Unidas nos exhibe como la región más violenta del mundo, a pesar de todo esto... no falta quien desde el primermundismo salvadoreño minimiza o incluso niega que la nuestra sea una sociedad especialmente violenta.

Ocurre con demasiada frecuencia que cuando uno cuenta una historia tejida con el llanto de las víctimas, saltan voces que dicen que no, que muy sensacionalista usted, que violencia en todos los países hay, que por qué no dedicar el tiempo a relatos de superación y éxito. Una manada de avestruces que desde dentro de sus burbujas recriminan que dirigir el foco a lo que está sucediendo allá abajo –hacia eso que con cariño y respeto yo acostumbro a llamar el bajomundo– no hace sino dañar la imagen del país.

Dicen: la violencia no es algo exclusivo de El Salvador. Dicen: aun en los países desarrollados suceden cosas que da asco contarlas. Dicen: en todas partes suceden cosas parecidas.

Un dato asolador: para igualar la tasa de homicidios que El Salvador cosechó en 2013, en España tendrían que haber asesinado a más de 18,000 personas, y asesinaron a 302. Y eso que para nosotros 2013 fue el año menos violento de la última década, consecuencia directa de la polémica tregua –promovida por el gobierno del expresidente Mauricio Funes– entre las pandillas Mara Salvatrucha y Barrio 18.

Ocurre con demasiada frecuencia que los que más alejados estamos del fenómeno de las maras nos negamos a aceptar lo que hemos construido, nos negamos a vernos como corresponsables.

El libro digital que tiene entre sus manos no aspira a cambiar la naturalidad con la que se convive con la violencia en El Salvador; sería arrogante siquiera pretenderlo. Los que se niegan a mirar no verán. El país seguirá siendo lo que es, una sociedad marcada a fuego por la violencia. El anhelo de este esfuerzo periodístico bautizado Yo bajomundo no es pues corregir u orientar, aleccionar, sino que su vocación es de registro histórico, como el fotógrafo que llega al campo de batalla y fotografía lo que ya no tiene solución. Las cuatro crónicas que lo integran son apenas cuatro piezas de un rompecabezas infinito, cuatro estampas que tratan de explicar –desde una visión humanista de la investigación periodística– la que sin duda es la expresión más aguda del problema de violencia que nos define como sociedad: las maras.

Yo violada es la historia de una muchacha violada salvajemente por una clica del Barrio 18; una violación, como tantas otras, que ni siquiera entró a formar parte de los registros oficiales. De esta crónica el periodista estadounidense Jon Lee Anderson escribió esto: “Parece ser la metáfora más visceral de una sociedad sofocada, que no logra imponer la autoridad moral, porque no la ampara un Estado de derecho”.

Yo torturado de alguna manera retrata la Policía Nacional Civil que tenemos, un cuerpo saturado de elementos para los que el respeto a los derechos humanos es un imposible. Narra la tortura de la que fue objeto un joven por el simple hecho de vivir en un sector de mareros, sin que él tuviera nada que ver con ellos.

Yo pandillero es la historia de vida de un sádico integrante del Barrio 18. Encarcelado, casado y cerca de convertirse en treintañero, reflexiona sobre la indeseada posibilidad de que su hijastro siga sus pasos.

Por último, Yo madre nos acerca al drama infinito de la madre de un pandillero de la Mara Salvatrucha, una madre que odia a la pandilla tanto como quiere al fruto de su vientre, y que por ese amor está dispuesta a soportar todos los vejámenes con los que el Estado y la sociedad salvadoreñas castigan a personas como ella.

Esta tetralogía de crónicas no se concibió para integrar un libro, sino como historias independientes que fueron publicadas entre los años 2009 y 2013 en el periódico digital El Faro. Son historias reposadas, en las que invertí mucho tiempo para tratar de invisibilizarme como periodista ante las víctimas y/o victimarios. Reeditadas y empaquetadas ahora, quizá ayuden a comprender mejor las miserias y también las grandezas del bajomundo, que es donde a mi juicio anidan las esencias más puras de la salvadoreñidad.

Como el agua y el aceite en un vaso, el bajomundo y el primermundismo que complementan la sociedad están siempre en contacto, pero nunca se mezclan. Y si el bajomundo lo integra la mayoría de los salvadoreños, el primermundismo somos esa franja privilegiada de la población que tenemos los tres tiempos de comida garantizados y las necesidades básicas cubiertas, ese 20-30% de los salvadoreños que, con más o menos agobios, llegamos a fin de mes y que podemos pagar en lo privado por los servicios de salud, educación y esparcimiento que el Estado no alcanza a cubrir. Los que tenemos internet, vamos al cine o podemos dar un vaso de leche cada noche a nuestras hijas. Usted, si está leyendo esto en una tablet o una computadora, solo eso ya lo ubica en el aceite, entre los privilegiados.

Yo bajomundo es una pequeña ventana al bajomundo. Estas no son historias seleccionadas por su crueldad, no son ejemplos rebuscados de atrocidades extremas. Son cotidianidad. Le invito a mirar y a conocer cómo se vive allá abajo.


Roberto Valencia, periodista
San Salvador, El Salvador
Julio de 2014



Este e-book incluye cuatro crónicas (Yo violada, Yo torturado, Yo pandillero y Yo madre) y está a la venta en la tienda virtual del periódico digital El Faro. El precio es 5 dólares. Si le interesa, puede adquirirlo en este enlace > http://goo.gl/oTG4lO

Respétese, señor Funes

$
0
0

Quiero pensar que solo le trasladaron información equivocada, pero el secretario general del FMLN, Medardo González, mintió cuando el martes 3 de marzo, en conferencia de prensa, dijo que en los municipios que ganó su partido vive el 67 % de los salvadoreños. Lo dijo con estas palabras: “Ahora, con estas 86 alcaldías, el FMLN tiene una fuerza poblacional del 67 %, y nuestro partido tendrá mayores niveles de incidencia y de responsabilidad”. Con un periodismo como el salvadoreño, que en esencia se dedica a transcribir lo que dicen las fuentes sin el más mínimo contraste, el dato ha sido repetido hasta viralizarse.

Falta la certificación oficial, pero parece que el FMLN en efecto se impuso en 86 de los 262 municipios de la República, incluido un puñado de las ciudades más populosas, como San Miguel, Soyapango, Mejicanos, San Juan Opico y, por supuesto, San Salvador. Ahora bien, en esos 86 municipios residen 2,484,297 personas, que suponen el 38 % de las 6,460,271 habitantes que se estima que viven en El Salvador. Nada que ver con la cifra del 67 % que con orgullo desmedido aireó Medardo González.

Para los más dogmáticos militantes y simpatizantes del FMLN, aquellos que sentirán como una afrenta que un donnadie se atreva a contradecir en público a su secretario general, comparto el informe oficial ‘El Salvador: Estimaciones y Proyecciones de Población. Municipal 2005-2025’, de la Digestyc, fechado en septiembre de 2014, y por lo tanto obra del gobierno de Salvador Sánchez Cerén. Ahí aparecen los estimados oficiales de población para 2015 en los 262 municipios del país. Con papel y lápiz, calculadora y un poco de paciencia comprobarán que es falsa la cifra que proclamó Medardo González en conferencia de prensa. Y no por uno, cuatro o diez puntos porcentuales. Tergiversaron los datos para que el 38 % de los salvadoreños se convirtiera en el 67 %. No son centavos. Ojalá el FMLN reflexione sobre la calidad de la información que aporta a la sociedad, y ojalá también el gremio periodístico reflexione sobre qué tratamiento da a las informaciones que las fuentes aportan.

Pero si me animé a escribir esta columna no fue para denunciar las cuentas alegres que hizo la dirigencia del FMLN. No. El detonante de este texto fue el uso que el expresidente de la República, Mauricio Funes, hizo desde su cuenta de Twitter de estos números errados.

Después de conocerse el errado dato del 67 %, el señor Funes publicó los siguientes tuits:

El 3 de marzo, a las 9:09 p.m.: “No es la cantidad, sino la calidad de la victoria lo que cuenta. Gobernar el 67 % de la población a través de municipios habla de fuerza”.

El 3 de marzo, a las 9:13 p.m.: “Con las alcaldías ganadas por ARENA gobernarán menos del 40% de la población. A eso le llaman victoria? El FMLN en cambio gobernará al 67%”.

El 3 de marzo, a las 9:28 p.m.: “Los municipios q gobernará el FMLN representan 67% de la pob. Si sumamos los de GANA,PCN Y PDC, ARENA no alcanza ni un 40%.Eso es verguiada?”.

El 3 de marzo, a las 9:32 p.m.: “No es la cantidad, sino la calidad de la victoria lo que cuenta. Gobernar el 67% de la población a través de municipios habla de fuerza”.

El 4 de marzo, a las 12:17 p.m.: “El Ejecutivo en manos del FMLN. 67% de la población en los municipios ganados. Mayoría legislativa junto a GANA #ElCambioEsPrimeraFuerza”.

El 3 de marzo a las 11:09 a.m., apenas supe de los datos hechos públicos por Medardo González en la conferencia, se me ocurrió tuitear esto: “Cada partido hace la lectura que le interesa. FMLN baja de 95 a 85 municipios gobernados, y están presentándolo como triunfo arrollador”. Por ese tuit el señor Funes me llamó “troll de ARENA” en Twitter. Lo replicó dos veces desde su cuenta con comentarios despectivos. Se burló.

Hagamos a un lado el hecho de tener a un expresidente que, sin haberse cumplido un año desde que dejó el Ejecutivo, se dedica a tuitear como adolescente despechado. Créame, señor Funes, que yo lo estimé en su extinto rol de periodista, y que celebré su triunfo electoral porque fui de los incautos que me creí su eslogan del cambio. Allá estuve aplaudiéndolo aquel 15 de marzo histórico en el redondel Masferrer.

Usted, a mi criterio, fue una decepción como presidente, y ahora compruebo que también como periodista deja mucho que desear. Es, reitero, lo que me animó a escribir esta columna, señor Funes. ¿86 municipios en los que viven el 67% de los salvadoreños? ¿No le sonó tantito exagerado? ¿Se atrinchera y replica hasta la saciedad sin verificar los datos que brinda una fuente con evidentes intereses, como lo es cualquier partido político? ¿Nunca supo el significado de ‘contrastar una información’, en especial antes de hacer tanta alharaca, tanta estridencia?

Señor Funes, usted es el expresidente de la República y alguien que gozó de la genuina admiración de buena parte del gremio periodístico. Respétese, por favor. Respétenos.


Vigésimo tercer comunicado de las pandillas

$
0
0

Los voceros nacionales de las pandillas MS-X3, Barrio 18, Mao-Mao, Máquina, La Miarada Locos 13, privadas y privados de libertad de origen común, al pueblo salvadoreño y demás pueblos del mundo, hacemos saber:

1- Con satisfacción informamos que desde el día sábado 17 de enero del corriente año, estamos impulsando a nivel nacional un gesto unilateral de buena voluntad, que busca contribuir en la reducción de la violencia; sus efectos ya se hacen sentir en la drástica disminución que ha experimentado la tasa de homicidios desde el día 18 de enero, habiéndose reducido del promedio diario de 14 a 4.6 que se registró ya para el día sábado 24; inclusive, el día veintidós la tasa se redujo a cero.

2- Para hacer posible lo anterior, estamos realizando extraordinarios esfuerzos, debido a que las condiciones en la que lo impulsamos no nos son favorables y nos provocan dificultades que hacen difícil administrar un proceso tan complejo como este, para lo cual es necesario contar con algunas condiciones y facilidades que por ahora carecemos.

3- Esperamos que este nuevo gesto mantenga viva la esperanza de que el problema de la violencia si tiene solución y permita que los que no han querido oír destapen sus oídos y que los que no han querido ver puedan hacerlo para evidenciar que es el dialogo incluyente la vía civilizada para encontrar solución a estos graves problemas y que no se puede seguir obviando he ignorando que las Maras y Pandillas podemos ser parte importante de la solución del mismo, voluntad que ya hemos expresado en infinidad de ocasiones.

4- Esta probado que si todos los involucrados nos lo proponemos, la paz puede ser una realidad: las pandillas haciendo lo que nos corresponde y el Estado y la sociedad civil lo que a ellos les compete. El logro de la Paz es tarea de todos, no solo las pandillas generamos violencia como ha quedado evidenciado, hoy en día, la PNC ya aporta al menos con un homicidio por día a esa tasa y los grupos de exterminio de pandilleros que operan con el amparo y apoyo de entidades públicas y privadas ya contribuyen a la tasa de homicidios con masacres, que son presentadas como acciones de purga interna entre nosotros para obviar la respectiva investigación que los puede incriminar.

5- La difícil situación por la que atraviesa el país requiere de acciones proactivas y de mensajes que aboguen por la paz y no de desesperadas acciones que lo único que hacen es tocar tambores de guerra y por consecuencia avivan la fogata de la violencia.

6- Las maras y pandillas de El Salvador estamos listas para entrar en un proceso serio de búsqueda de la paz, como se nos ha propuesto por aquellos que tienen un genuino interés de trabajar por ella, la pregunta que nos hacemos es: ¿Esta el Estado salvadoreño y la sociedad civil lista para entrar en ese proceso?. Si la respuesta es afirmativa, no demoremos más tiempo e iniciemos cuanto antes juntos la construcción de la paz que tanto anhela la sociedad salvadoreña.

El Salvador, 26 de enero de 2015.

Foto: José Cabezas (AFP)

-------------------------------------------------------------

Lea además:

Vigésimo cuarto comunicado de las pandillas

$
0
0

Los voceros nacionales de las pandillas MS-X3, Barrio 18, Mao-Mao, Máquina, La Miarada Locos 13, privadas y privados de libertad de origen común, al pueblo salvadoreño y demás pueblos del mundo, hacemos saber:


1- El país atraviesa por una situación difícil, como es costumbre ya, es a las maras y pandillas a quienes se nos atribuye la gravedad de toda la situación, con el perverso propósito de encubrir y proteger a otras estructuras o personas que practican accionar delictivo, quienes ante la sociedad se presentan como personas de bien, ya sea como: funcionarios públicos, empresarios, ministros, fiscales, policías, militares, religiosos, ex-presidentes y tantos otros que con toda desfachatez dicen ser parte de los “buenos”, y en realidad, cuando son descubiertos y procesados – algo que sucede muy poco – resulta ser que son iguales o más criminales que nosotros, pero eso sí, a la hora de condenar a otros, no vacilan en ser los primeros en lanzar piedras.

2- Las maras y pandillas hemos tenido que recurrir a formas ilícitas para sobrellevar nuestras vidas, al ser nosotros y nuestras familias los históricamente olvidados y marginados por las gestiones gubernamentales, nuestro origen está en las comunidades más empobrecidas, en los hogares desarticulados por la emigración, la violencia y la irresponsabilidad paterna o materna, es a nosotros a quienes se nos niegan oportunidades de educación, salud, trabajo, recreación y lo único que se nos ofrece es represión, cárcel y muerte.

3- El gobierno habla mucho de paz últimamente, pero en las actuaciones lo que se alimenta es la guerra, si el propósito de paz que se pregona es genuino, debería de atacar causas y no solo efectos; la absurda represión y el manodurismo en lugar de resolver agrava la conflictividad. Las maras y pandillas aprendimos con el proceso de paz que se impulsó en 2012, que es dialogando como se es más eficaz para enfrentar la violencia y disminuirla, que es hablando de paz y haciendo gestos de buena voluntad y no de guerra como el conflicto se des escala y dirime con menos costos económicos y sociales.

4- Afortunadamente, en el ambiente de belicosidad que impera en los últimos días, las voces de la sensatez siguen abogando por soluciones racionales al conflicto, hay propuestas de paz que han circulado, no habíamos respondido a ellas porque esperábamos conocer la disposición gubernamental de buscar la paz por esa vía, pero en vista de que en privado se nos dice que sí y en lo público se niega, hemos decidido tomar la iniciativa de forma unilateral. 

5- Congruente con lo anterior, hemos tomado la decisión de responder afirmativamente al llamado público que en últimos días ha realizado uno de los luchadores más incansables por la paz en El Salvador: El señor Raúl Mijango, quien ha presentado al país una propuesta de agenda para la paz que contiene 26 puntos, 13 para ser abordados por nosotros y los otros trece por el Estado, gobierno y sociedad civil.

6- Reiteramos que asumimos todos los puntos que se nos proponen sin condiciones ni enmiendas, incluyendo los de respetar la vida de policías, soldados, militares, custodios, funcionarios públicos, jueces y políticos y por supuesto la vida de los más humildes a quienes afecta la violencia. También, sobre los delitos patrimoniales como el robo, hurto y extorsión. Pedimos al gobierno no obstruir ni sabotear este proceso, por el contrario que facilite condiciones que nos permitan avanzar más rápido en el tiempo y los compromisos que hemos de asumir ante la sociedad, este es el regalo que en su beatificación le queremos hacer a Monseñor Romero: Nuestro arrepentimiento y solicitud de perdón a la sociedad por todo el daño causado.

7- En consecuencia de lo anterior, anunciamos que desde ya estamos girando instrucciones de acuartelamiento a nuestras unidades, de almacenamiento de hierros y pertrechos y que todos, tanto adentro de las prisiones como fuera de ellas, se concentren en el estudio y la discusión de los 13 puntos que se nos han propuesto, afín de lograr consensos que permitan responder satisfactoriamente a lo que la sociedad espera de nosotros: menos homicidios, menos extorsiones; en definitiva: menos violencia. Según sean las condiciones con que contemos para esta reflexión, así iremos anunciando en su momento los compromisos que asumiremos con la sociedad sobre cada punto.

8- Como muestra de compromiso y buena voluntad, cesaremos desde ya todo tipo de ataques, es más, no haremos uso ni del elemental derecho a la defensa. Solo pedimos que paren los abusos de autoridad y las acciones de exterminio que en su mayor parte están siendo presentadas como riñas entre pandillas, cuando en realidad lo que sucede es que de sus casas sacan a nuestros miembros y luego los asesinan, simulan enfrentamientos y colocan armas a los muertos para justificar las masacres, etc. Muchos han lamentado el deceso de policías, pero han callado o se han alegrado por el exterminio de más de ciento cuarenta miembros de pandillas solo en el mes de marzo de este año.

9- Para dar confianza al desarrollo del proceso y evitar el que se crea que lo hacemos con propósitos mal sanos, pedimos que el debate privado que desarrollaremos en el interior de los Centros Penitenciarios sea monitoreado por una entidad de gran prestigio y reconocimiento internacional y que ya cuenta con una misión en El Salvador: El Comité Internacional de la Cruz Roja CICR y en la Libre, por los Obispos y Pastores coordinados por la Iniciativa Pastoral por la Vida y Por la Paz, IPAZ. Quienes puede solicitar apoyos técnicos a las instituciones tanto nacionales como internacionales con experiencia en la mediación y resolución de conflictos.

10- Como el problema de la violencia es un problema nacional, para saberla superar hay que sacarla del circulo vicioso y dañino de la confrontación política, en tal sentido proponemos se cree una Instancia Bipartidista, técnica y política en la que estén representados las dos principales fuerzas políticas del país: ARENA y FMLN y que sea en esta instancia que con sentido patriótico y sin intereses electoreros se consensúen las acciones y las iniciativas de ley que volverán sostenible e irreversible el proceso de paz que se vaya construyendo.

El Salvador, 20 de abril de 2015.

Foto Roberto Valencia
-------------------------------------------------------------

Lea además:
Viewing all 127 articles
Browse latest View live